Como validar emocionalmente a otras personas
En muchas ocasiones en sesión hablamos de la validación emocional. Pero, ¿qué es y cómo podemos llevar a cabo?
Validar las emociones de los otros es fundamental para tener una relación saludable. Esta es un proceso de aprendizaje que se basa en el entendimiento y la aceptación de la expresión emocional del otro o uno mismo. Lo contrario a este proceso es la invalidación emocional, es decir, rechazo o juicio de la expresión emocional del otro.
La validación emocional aporta en las relaciones comprensión, reconocimiento, compromiso y confianza en el otro, pudiendo crear una base de una relación sana.
La validación emocional se da desde la empatía, continua con la aceptación de las emociones del otro y acaba con una comunicación sin juzgar.
Pautas para mejorar la validación emocional
Aprender a validar las emociones puede requerir práctica. Hay que hacer explícita la emoción que creemos que siente la otra persona y hacer que la otra persona se sienta aceptada, valorada y entendida.
- Escucha activa. Estar conectado con el momento y hacérselo ver al otro escuchando activamente lo que está explicando y dar señales de ellos (afirmar con la cabeza, repetir alguna palabra de la que ha dicho, preguntar, “te estoy escuchando”, etc.). Atender a lo que explica.
- Feedback. Dotar al otro de un resumen objetivo de lo que ha explicado para que se sienta escuchado y aclarar posibles discrepancias en el entendimiento. Dar importancia a lo que para la otra persona es importante y /o reconocer su esfuerzo.
- Empatía. No dejarnos llevar por lo que sentimos o creemos, e intentar entender qué siente y piensa la otra persona pera entender su reacción. Ej. (comprendo que te sientas ….)
- Normalizar emociones y situaciones. Entender que las emociones y la forma en que puede estar viviendo el otro una situación es algo normal para cada persona y respetarlo. Demostrar que entiendes el derecho a que sienta lo que siente e invitar a que lo exprese sea lo que sea. Ej. (está bien que llores, estaré aquí contigo).
- Acompañar. Atender al otro sin esperar nada a cambio o sin comparar con experiencias propias. Hacerle entender que es su momento y le estamos acompañando. (ej. Coger las manos, ¿puedo hacer algo para ayudarte?).
En ocasiones es difícil tratar un tema delicado para el otro y no sabes como iniciar la conversación. Se pueden hacer preguntas como: ¿quieres hablar de eso?, ¿Cómo te sientes?
Por lo que para tener una relación saludable es importante escuchar nuestras emociones, sentimientos y deseos, pero también las de la otra persona, ya que así se sentirá a gusto a nuestro lado. Pero sobre todo es importante que haya reciprocidad, cuidar al otro, pero también que nos cuiden, sino es importante detectarlo y alejarnos de aquellas personas que no lo hacen.
